@julianetid: No es una verdad muy agradable, pero los hombres que atraemos son un reflejo de nuestras propias creencias. Mientras dentro sigan viviendo los miedos, las heridas y los viejos guiones, volveremos una y otra vez a toparnos con los mismos abusadores, tiranos o débiles. Pero toda mujer puede cambiar eso. Solo hace falta mirar honestamente hacia adentro, reconocer y sanar lo que no le permite vivir plenamente, dejar de aferrarse a los viejos papeles y hábitos. Entonces desaparece la necesidad de atraer hombres y situaciones que destruyen. La conciencia da una fuerza increíble: empiezas a elegir tú, en lugar de conformarte con lo que “te toca”. Es justo ahí cuando aparecen las relaciones maduras y sanas. Sin luchas ni altibajos eternos, solo la sensación de seguridad y la alegría de vivir cada día.